El Infierno
de Luis Estrada
Por Alfredo BSG
El Infierno Núm. 1
Soy esa clase persona que no solo llega tarde a todos lados (oficina, fiestas, citas, eventos y un largo etc.), también tengo la característica de llegar tarde a los acontecimientos de la cultura en casi todas sus manifestaciones. Por lo que claro que vi tarde El infierno, la laureada película (mexicana) de Luis Estrada de 2010. Y ya que mil años después la vi en Netflix, también pude ser parte (tarde) del entusiasmo general que la cinta levantó. Eso sí, a modo de exclusiva, en la San Diego Comic Con de 2011, pude ver varias páginas del cómic que José Luis Pescador estaba trabajando, basado en El infierno.
¿De qué se trata? El Beny nos cuenta la historia de que tras darse cuenta de que en el lugar en el que vivía, no había futuro, decidió irse al “otro lado”, solo que el asunto aquí no es la decisión de irse, sino lo que en el camino y en los siguientes quince años, le tocó vivir.
¿Está bueno? Sí, aunque hay un PERO, los eventos contados en este primer episodio aunque tienen situaciones muy rudas a nivel de planteamiento, no son explotados como para dejar huella en la historia, ya que el relato sí se siente más como parte de algo más grande y no vive por sí solo. Ahora bien, Pescador es un ESTUPENDO narrador gráfico, mismo que no me dejaba terminar de decir que BACHAN es mi artista favorito del cómic, cuando llega este cabrón a decir: mira mi hermoso y expresivo trabajo. Los trazos de Pescador oscilan entre la caricatura, el costumbrismo, el expresionismo y sí, lo profundamente cinematográfico que un dibujante de cómics puede lograr.
¿Lo recomiendas? Con todo y el dedazo que una de las cajas de texto tiene, CLARO QUE LO RECOMIENDO, no solo por lo inusitado del asunto (adaptar al cómic una película mexicana), sino porque de verdad el resultado está chingón.
El Infierno Núm. 2
Si usted no se acuerda ya muy bien de la película (como yo), al demonio, mejor lea este cómic al que se le olvidan las diéresis en la palabra “güey”, pero que más allá de esa nimiedad, está de rechupete.
Yo tenía razón, el número uno es algo lento y se siente vinculado a algo más grande y para el número dos, la historia ya se deja contar con fluidez y el horror de un pueblo azotado por la violencia del narco mexicano. Pescador, quien en el capítulo anterior hace gala de su pirotecnia visual, acá nos deja ver que sus mejores trucos se los andaba guardando para más adelante. Estamos frente a uno de los MEJORES dibujantes de cómics que México ha dado.
De verdad, por favor, dejen de hacer lo que sea que estén haciendo y COMPREN esta serie.
El Infierno Núm. 3
Crudo, brutal y a la cabeza. Maldito Pescador no sé cómo le haces, pero tus imágenes enchinan la piel atestiguando las atrocidades de un México necio, al que la película a penas pudo esbozar. Poderosa serie que está lejos de terminar. Ya quiero mi numero 4 ¡LÉANLA!
El Infierno Núm. 4
La historia corre a cuenta gotas y volver a ver al Cochiloco es igual de genial que en la película, si no es que más. La secuencia en la morgue es escalofriante y el último acto en la cantina/congal es de un costumbrismo que me cae que ni las mejores plumas latinoamericanas o los lentes del cine mexicano, son capaces de retratar. Pescador es un CHINGÓN y san se acabó. A ver ahí cuándo nos hacen el milagrito de sacar el número 5 ¿Qué, sigue usted aquí leyendo? NEL, sáquese a la chingada y directito a Comixology a comprar esta joya, ¡órele, cabrón, órele!