Por El Comicólogo

¿Te ha pasado que viendo una serie de televisión o leyendo una novela no puedes dejar de leer, y terminas leyendo dos capítulos más o de plano la temporada completa? Lo más probable es porque los creadores han utilizado a su favor el suspenso o momento culminante, en inglés es conocido como cliffhanger.

Cuando la historia se cuenta a lo largo de diferentes capítulos o números de un cómic, es importante mantener interesado a los lectores para que regresen a la siguiente entrega y puedan llegar al final de la historia. A nosotros nos interesa que los lectores sigan nuestra historia para que puedan llegar al final y cada vez más se hagan seguidores de nuestros personajes.

El mayor momento de tensión o suspenso es conocido como cliffhanger. Cliffhanger es una palabra en inglés que significa literalmente que mantienes a tu audiencia en el borde. Es un mecanismo en la trama en donde un componente de la historia termina sin resolverse, usualmente de una manera impactante o de suspenso. Esto lo hacemos esperando que nuestra audiencia continué leyendo o espere la siguiente entrega de nuestra historia.

Este recurso literario se utiliza en películas, series de televisión, novelas y ¡claro!, cómics. Aunque en los cómics se ha utilizado para que las personas continúen comprando los siguientes números, también se puede usar en momentos que no necesariamente sean el final para mantener con interés a nuestros lectores. Al final, esto es lo realmente importante, que nuestro lector se encuentre interesado para continuar leyendo.

Cuando empleamos de manera correcta este mecanismo nos permite dar a nuestro público preguntas, las cuales desean y buscan conocer las respuestas, ¡claro!, leyendo la continuación de la historia. Típicamente, un cliffhanger se detiene a la mitad de un evento climático en lugar de terminarlo.

Hay dos grandes categorías de tipos de Cliffhanger:

1. Nuestro personaje principal se encuentra con una situación peligrosa o hasta mortal. En cómics que no son de aventura, podemos recurrir a situaciones que afectarán significativamente la historia, y el desenlace de la misma.
2. Una revelación sorprendente o una verdad que puede alterar significativamente el curso de la narrativa.

Es por eso que aquí en Tándem Cómics y El Comicólogo, te damos los siguientes cinco consejos para lograr enganchar a tus lectores y ¡quieran leer cómo continua la historia!

1. Planeación

El aspecto más importante es saber hasta qué parte de la historia deseas llegar, es decir, tienes que saber en qué momento planeas dejar la historia para que genere suficiente interés para que los lectores regresen por más. Esto solamente se logra planeando desde el guion. Ya sea que lo hagas por tu cuenta o con un equipo, tienen que planear cada capítulo para que finalice en un punto que el lector tenga que continuar leyendo.

2. Corta antes

A lo que me refiero específicamente es que mandes los últimos eventos de tu capítulo o cómic al siguiente. Es normal que planeemos cada entrega con un final definido. Para ayudarte a crear cliffhangers de una manera más sencilla, lo normal es dejar —literalmente—, preguntas o eventos sin resolver… hasta el siguiente capítulo.

3. ¡Sorpresa!

Introduce, hasta el final, algún dato o nueva información que cambie de manera importante tu historia. Esta información tiene que provocar la curiosidad de nuestros lectores, pues puede cambiar hasta el final de lo que estamos leyendo.

¡PRECAUCIÓN! No seas predecible, no hay peor suspenso que el que no lo es. Si es un dato o información que es predecible, en lugar de crear suspenso se crea la sensación que no hay nada emocionante. También la forma en que esta información es presentada tiene que ser diferente, por lo cual hay que crear cada vez nuevas formas emocionantes de narrar tu historia. Recuerda, tiene que ser divertido y emocionante para ti, si no sientes estas emociones al narrar tu historia, es poco probable que los demás nos emocionemos con lo que nos estás contando.

4. Acción/Descripción

El cómic es un lenguaje, el cual principalmente es visual. Toda historia necesita de información para describir las características de ese mundo, ya sea una historia de ciencia ficción, de romance o de superhéroes. Tomando lo anterior en cuenta, debemos de idear y planear nuestros cómics para que tengan una mezcla correcta de acción visual y de información descriptiva y, como lo hemos dicho anteriormente, que la acción y la descripción se acaben dos viñetas antes para incentivar al lector a continuar leyendo.

5. Hazlo creíble

Antes de describir este punto, aclaro lo siguiente: recuerda que creíble no es realista. Realista implica que algún evento se acerca a la realidad, creíble son situaciones que podrían suceder, aunque sean poco probables en “la vida real”.

A lo que me refiero en este punto es que encuentres formas creíbles para mantener oculta la información para tu lector. Puedes cambiar de protagonista, a uno que no tiene toda la información a su disposición. Tu personaje principal puede que no tenga cobertura en su teléfono celular o simplemente sea algo que creíblemente desconoce.

Sospecho que esta es la razón por la cual muchas historias se desarrollan en décadas pasadas. Los teléfonos celulares han cambiado la manera en cómo nos comunicamos entre nosotros y cómo podemos buscar la información.

Y aunque dijimos que íbamos a dar solamente cinco tips doy un extra pues es mi favorito.

6. In media res

Este recurso se refiere a comenzar una narración en medio de una escena y trabajar el cómo se llego a esa situación. También agrada porque rompe con la idea de que el cliffhanger solamente sirve para el final de un cómic, sirve para que, desde la primera página , el lector desee saber el camino a esa escena inicial, es decir, desea leer la historia.

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Cualquier comentario o duda que tengas a este y otras formas de crear tus cómics, puedes escribirme a elcomicologo@gmail.com